-Hasta que te encontré, maldita casa... -Me dije
Llegué después de haber tenido esa amistosa charla con Rena-chan, busqué la llave que se encontraba en uno de los cuantos bolsillos de mi maleta y la introduje sin mucha dificultad en la cerradura de la puerta; Ya abriéndola, entré, cerré la puerta con llave, me dirigí a mi cuarto, tire la maleta hacia al lado de la cama y yo encima de esta... exhausta me relajé y me quede dormida.